viernes, 13 de febrero de 2009

Ya sucedió


Tal vez la médula de toda la Ciencia Ficción, pelando las cáscaras prescindibles, es el encuentro del Hombre con otra Existencia Inteligente. Se da por supuesto que el día en que eso suceda habrá un “crac” en las cabezas, porque significaría el fin del reinado del Único, el “centro del universo”.
La aparición de otro, simplifiquemos, Ser Inteligente, cuestiona desde las raíces mismas todo el andamiaje religioso; al menos de las religiones monoteístas mediterráneas, que son las que mandan en Occidente y sus vecindades. Una catástrofe filosófica. ¿Una catástrofe?
Hace una pila de años atrás el Hombre no solo conoció otra especie tan inteligente como él: el Neandertal. Más, compartieron este mundo, tal vez con las mismas costumbres con que hoy lo compartimos, mezclando guerras con fiestas.
Cómo desapareció esa otra inteligencia no se sabe. Tal vez de eso se encargó el Hombre (Sapiens Sapiens). Lo cierto es que el Ser Inteligente que sobrevivió, nosotros, se trabajó el olvido del otro y escribió una historia de dioses y designios “sobrehumanos” que lo justifican como Único, con olor a coartada.
Ya hace más de 30.000 años lo sabíamos, no existen los pueblos elegidos, si no inventamos los dioses que nos hagan únicos.¡Qué cosa es la Ciencia Ficción! Nos juega sucio planteando en el futuro nuestros crímenes del pasado. Nada que hacer, la Ciencia Ficción ha sido el aporte más destacado de la literatura, y tal vez la filosofía, en el siglo XX.

No hay comentarios: