viernes, 30 de mayo de 2008

Milán y Leonardo


Y seguimos poniéndonos al día para que los pocos que leen este blog sientan que también mueven el culo por el mundo.
Milán. 7 de mayo. “El día negro” VI Edizione. Factotum: Dante Liano, autor de Guatemala que hay que leer. Lugar: Universidad Católica. Integrantes de la mesa redonda “La pista española”: Juan Aparicio-Belmonte, Carles Quiles, el quía, y los dos Dantes –muy italiano- Dante Liano y Dante Barrientos Tecún, también guatemalteco y profesor en Francia.
Cuando íbamos hacia el gran salón de conferencias, Carles Quiles, novelista, catalán y periodista de policiales, dice:
-Estamos en la Universidad Católica ¿Acá no podemos decir me cago en la hostia, no?
Y tenía razón. En la pared a nuestras espaldas un Cristo crucificado de más de cinco metros velaba como la espada de Damocles. Como compensación el público eran cientos de mujeres no mayores de 25 años. En el estrado, la testosterona a full. De golpe nos volvimos hasta inteligentes.
Pero lo mejor fue al día siguiente. A escasos doscientos metros del hotel tenía Il Cenaculo de Davinci. Sí, “La última cena”.
Pagué los 6,50€ de rigor, y entré con 24 presumibles alemanes a gozar de los 15 minutos de visita.
Algo me quedó claro, más allá de “El Código Davinci”. La pintura es grande en todos los sentidos. Leonardo era un gran narrador, y los agrupamientos revelan discusiones y reclamos varios.
Eso sí, que no me vengan con que quien está a la derecha de Cristo es un apóstol. Es una mina, una mujer de acá al infinito. ¿Qué en total son 12? Y bueno, pongamos que Judas faltó a la cita porque tenía sus negocios. Pero a la derecha del “troesma” hay una mina.¿Qué quiso hacer Leonardo? Es un poco tarde para preguntárselo. Visto lo que he visto, me juego a que pintó el casorio de Cristo, tal vez con María Magdalena, ya que estamos, o alguna prima y, que, para no meterse en líos con la Gran Puta de Babilonia –léase Iglesia Católica- le cambió el título.

miércoles, 28 de mayo de 2008

Todos por el Nóbel





Las Abuelas de Plaza de Mayo han sido propuestas para el Nóbel. Está muy claro que no necesitan ese reconocimiento, que compartirían con el genocida Kissinger, también Nóbel de la Paz. Sabemos que ese premio, como el español "Principe Larguirucho", es pura política comercial, otro poco de mierda al uso.
Pero, las Abuelas, creo que han demostrado siempre que no desperdician ninguna oportunidad que sirva para su lucha por la recuperación de los pibes robados y sus padres desaparecidos. ¿Vamos a ser más papistas que el Papa?
Además, me muero de ganas de verlas ahí, diciendo un par de verdades como los puños de Casius Clay, a una banda de mamarrachos con corbata.
Yo no me privo, desde ahora cacho el bombo y me sumo a todas las listas de firmas que pueda. Acá tienen su oportunidad:
nobelabuelas@gmail.com - incluir DNI.

martes, 27 de mayo de 2008

SECO SE MOJA

Imaginen un centro social como los que abundaban en los 70, y que se llama SECO. Gente que se ocupa de darle bola a los pibes hijos de inmigrantes en el popular barrio de Vallecas, Madrid. Imaginen que tienen una habitación llena de bicicletas para salir con caravanas “bicicríticas”, en las que un altavoz a batería propala que el mundo fue y será una porquería. Imaginen que tienen un club de lectura, simplemente porque leer y discutir lo que se leyó es bueno. Imaginen que se mandan tres jornadas de actividad cultural para el barrio y me invitan, porque leyeron “Siempre la misma música”. ¿Cómo me lo podía perder?
Las fotos engañan. No sólo comen como refugiados, también opinan, y la última escritora que pasó por su mesa todavía está reponiéndose de la paliza. No voy a hacer nombres porque no es de caballeros.
¿La verdad? En este mundo tan chingado hacia la derecha necesitamos muchos, muchos más SECO.
Ah, y que me perdone la banda de Vallecas, pero no pude evitar el chiste tonto del título.




lunes, 26 de mayo de 2008

Madrid, León y Vitoria


Vengo con atraso, pero decidido a poner este blog al día, cueste lo que cueste. Así que empiezo por el 14 de abril. Me tocó una maratón. El 14 hicimos mesa redonda con Juan Madrid, Andreu Martín, Mercedes Castro y el imponderable Paco Camarasa. Esto fue en la escuela “Manuel Besteiro”de la UGT (Unión General de Trabajadores).
Esta gente hace todo lo que puede por la cultura y creo le devolvimos su plata, con las ideas de siempre y alguna inédita.
En la escuela, un inmenso caserón en torno a también inmenso jardín, hay tres magnolios gigantes regalos de Eva Perón. Ojo, eso antes era escuela del Ejército franquista. Algo se avanza.
El 15 desarrollé mi “tesis” sobre la novela negra como novela social del siglo XXI, en la primera de tres jornadas organizadas por la Universidad de León.
Hay que ver las cosas que están pasando. Unos pocos autores y un centenar de expositores universitarios que se toman en serio la novela negra. Atentos al hecho, porque nunca antes había sucedido.
El 16 hice un viaje relámpago a Gijón, hospedado por Alejandro Gallo, novelista y jefe de policía de esa ciudad. Por supuesto, aproveché para enterarme de cómo viene este año la Semana Negra. Adelanto: sobre la playa y más reducida.
Al fin, el 17, Gallo y yo, con las provocaciones intelectuales de Javier Otaola, que aceptó jugar de abogado del diablo, hicimos lo posible por no dormir a los desconcertados de Vitoria que concurrieron a nuestra charla.Me quedé con las ganas de ver la fábrica de naipes de Heraclio Fournier, ahora me dicen que en manos yanquis. Y tampoco me pude acercar a Orbiso, el pueblo donde nació mi abuela Benita. Otra vez será.

La foto es de Vitoria.