Por fin un asado como la gente, de la mano de R, el muchacho del Mondongo.
Pero tal vez lo mejor no sea elogiar la panza llena, el sueño eterno de un bonaerense (natural de la provincia de Buenos Aires), lo mejor, me parece, es que al asado asisten los picaflores, también conocidos por otros como colibrí o "pájaro mosca".
Esto no es el trópico, pero tiene colibríes. Aletean entre las plantas del jardín, a pocos metros del asado, como pequeños y relumbrantes manojitos de plumas voladoras. Verdes, tal vez, tal vez azules, tornasolados seguro.
Y bueno, uno para poeta no va, pero puede inventarse alguna rara historieta comiendo junto a los colobríes.
Ah, cuando R. enciende los regadores, se estacionan en el aire y se bañan al sol.
Tan frágiles, tan pequeños y tan confiados.
6 comentarios:
Bien, Rodolfo!
Pero en cuanto se vaya el gallego devolveme los picaflores que te mandé desde Calamuchita.
Gille lopior es que se los queria manducar como si fuesen entremeses (una picada, como decimos los del sur profundo)
Prometo mandar los picaflores sin olor a humo de chori.
Salud, Rodolfo.
No hay quién se resista a un asado del tío R!! Pura envidia sana la mía, todo hay que decirlo. Espero se hayan comido unas buenas morcillitas en mi honor y, de postre, helado!!
Un enorme beso. La primogénita.
Que joder tanto con la Pepa.
Si primogenita( MARINA A.) el suceso termino con helado a discrecion y siesta con 30 grados de calor, Rematando todo esto con una maratonica ronda de mates amargos y torta casera bajo el Jacaranda.
Abrazote del tio Rodolfo y cia.
¿es cierto lo de Quiroga?
Raúl, me entero que estás en Argentina. Como no me asustan las diferencias y creo a que atí tampoco, me gustaría que me concedas una entrevista para el Semanario de Gualeguay.
Te dejo mi mail: horaciorpalma@yahoo.com.ar
Horacio
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